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Fenomenología de la conciencia inmanente del tiempo / Edmund Husserl

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Husserl, Edmund
Fenomenología de la conciencia inmanente del tiempo / Edmund
Husserl ; con prólogo de Ivonne Picard. - 1a ed. - Ciudad Autónoma
de Buenos Aires : Prometeo Libros, 2014.
192 p. ; 21x15 cm.
ISBN 978-987-574-640-4
1. Filosofía. 2. Fenomenología. I. Picard, Ivonne , prolog. II.
Título
CDD 142.7

 

El tiempo, según Husserl, no es un tiempo psicológico. Entendemos por ello exclusivamente “por el momento”, un tiempo “en” el cual estaríamos como en un medio especial. Es del tiempo después de la reducción fenomenológica que ha de tratarse, es decir, después de la renuncia
a las evidencias ingenuas, a las posiciones de creencia, incapaces de justificarse ellas mismas. No solo el tiempo sobre el cual hay que reflexionar aquí no es el tiempo del mundo o de la naturaleza, sino que tampoco es una recepción de contenidos, de vivencias que se suceden por una
especie de ley fatal inexplicable en la cual no participaría la conciencia. Se trata de comprender no un devenir, sino una conciencia del devenir, una conciencia del tiempo. El tiempo de Husserl no es una corriente de conciencia, un transcurrir. Todas estas metáforas son falsas. Solo se 
aplican a lo que es absolutamente objetivado, a lo que es cosa en el mundo, y no al tiempo tomado en su fuente. Sin embargo, Husserl emplea la palabra flujo, que designa el fenómeno originario de la temporalidad: producción ininterrumpida de nuevos aspectos de una cosa percibida, de
nuevos modos de darse de un sonido que se prolonga. “El engendramiento de modificaciones incesantes es el tiempo mismo”. Hay una organización continua de la conciencia a partir de impresiones primitivas renovadas sin cesar. Eso es lo que constituye la no inercia de la conciencia, su espontaneidad, lo que hace de ella flujo viviente.

 

Edmund Husserl nació en 1859 en Prossnitz (Moravia) y falleció en 1938 en Friburgo. Fue el fundador y principal promotor de la  filosofía fenomenológica. Entre sus obras principales cabe mencionar las siguientes: Investigaciones lógicas (1900-1901), Ideas relativas a una fenomenología pura y a una filosofía fenomenológica (1913), Lógica formal y lógica trascendental (1929), Meditaciones cartesianas (1931), así como La filosofía como ciencia estricta (1911) y La crisis de las ciencias europeas y La fenomenología trascendental (1936), estas dos últimas ya publicadas por Prometeo Libros.